Tremenda clavada en cuatro patas

Miren como le enseña a la cachonda de su novia a follar muy duro. Al verla entrar al cuarto con ese vestido que abrazaba cada curva de su escultural cuerpo, él quedó sin palabras. Su mirada recorría lentamente su silueta, desde los hombros desnudos hasta la delicadeza de su cintura. Ella, consciente de su efecto, caminó con calma, deteniéndose frente a él. "¿Te gusta?", preguntó con una sonrisa traviesa, mientras se inclinaba para acariciar su rostro. En ese instante, el mundo quedó reducido a su perfume, la calidez de su piel y la tentación infinita que despertaba con cada movimiento.

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13 noviembre, 2024